Decía "Numero desconocido", no le dí importancia y contesté, la voz detrás de la bocina me dijo: "Diana se murió". Colgó.
No conozco a muchas Dianas, tengo si acaso en mi facebook a 3 Dianas, una de un trabajo anterior, a la que medio veía con morbo cuando pasaba por mi lugar pero nunca me habló propiamante, tengo a una Diana que estuvo en la prepa conmigo y que era novia de un amigo, y la tercera es una Diana que creo me agregó porque tenemos amigos en común pero la verdad, si ella se hubiera matado sería algo que me tendría sin cuidado. Tambien tengo una vecina que se llama Diana pero no nos hablamos nada, solo nos saludamos cuando voy a casa de mis padres y ella está ahí, con su panza de embarazada, ya más grande aunque sólo nos llevemos un año.
Me conecté y busqué a las CyberDianas, una estaba en línea y lo que nunca, la saludé...me dijo que como estaba le dije que bien, en ese momento le dije adios. La otra diana aparecia Away, no creo que pongas un status de Away el día que te mates. La otra, la desconocida, intenté entrar a su facebook pero me había borrado ya, pensé...ni modo, si se murió ni modo.
Le llamé a mi padre, lo saludé, le pregunté si de casualidad había visto estos días a Diana, la vecina, me dijo que se la había topado 5 minutos antes comprando leche en la tienda de por la casa.
Cual Diana? me quedé pensando.
Conduciendo a mi casa pasé por donde estaba La Diana, reproducción de la Diana Cazadora que tenemos en nuestra calurosa ciudad, no dejaba de pensar en Diana, no me importa Diana y si se mató la verdad me vale madre, pero la duda, el desconocimiento, el no saber y no controlar es lo que me tenía harto.
Diana...Diana...chingado pinche Diana.
Dormí pensando en Diana, una Diana que yo no conocía, una Diana perfecta que caminaba entre mis sueños y a quien yo veía sonreir maliciosamente mientras se ponía un revolver en la cabeza y se escuchaba el disparo seco que rompía mis sueños y me despertaba.
Me volví a dormir y de nuevo la misma escena, Diana ahora, con otra cara, lentamente, siendo Diana y todas las mujeres de mi vida, tomaba el revolver de nuevo y ahora si alcanzaba a tomar sus manos justo en el momento del disparo, sentí el calor, sentí la sangre, la probé, el olor de la carne quemada...y a Diana, desvaneciendose en mis brazos. Pinche Diana.
Al día siguiente recibí una llamada. "numero desconocido"...contesté...era la voz de Diana en una grabación.
-Hola, soy Diana, decidí hacer esta llamada postuma para decirte que hoy más que nunca debemos apoyar a las fundaciones de lucha contra el cancer, yo ya no estoy aquí, pero hay muchas personas que aún pueden salvarse..con sólo donar..."
Colgué. Pinches Publicistas. Pinche Diana.
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